jueves, 6 de diciembre de 2012

GALLARDON REGALARA EL REGISTRO CIVIL



El Ministerio de Justicia  pretende ceder al  Colegio de Registradores el Registro Civil  lo que le costara a los registradores  más de 300 millones de euros lo que, en definitiva, supone la privatización del registro y un nuevo trasvase de un servicio publico al beneficio de unos pocos.

La reforma integral de los Registros Civiles que esta ya cerrada a través de un anteproyecto de ley que aprobara el Consejo de Ministros en las próximas fechas, supone otra medida más de perdida de derechos y servicios que se añade a la “ ley de tasas judiciales” que ya aprobó este gobierno.

La ley 20/2011 de 21 de julio, de registro civil, aprobada por el partido socialista, preveía en su preámbulo la modernización del registro civil a través de la informatización y su accesibilidad electrónica, pero este gobierno ha decidido que el coste de la modernización no lo puede asumir y para ello entregara a los Registradores la titularidad y beneficios obtenidos a condición de su digitalización y modernización.

Esto  supone que los registradores compraran sin concurso el servicio y que ellos mismos lo gestionaran. Para ello se establecen aranceles y tasas para la obtención de partidas de nacimiento, defunción o matrimonio por ejemplo que hasta ahora son gratuitas.

En la actualidad la propia administración solicita partidas de nacimiento para la obtención de un dni que a partir de la aprobación de esta ley serán de pago, aunque la administración las exija obligatoriamente, eso si ya no estarán expedidas por la autoridad judicial sino por un registrador, ya que a partir de la puesta en marcha de esta ley, los registradores sustituirán a los jueces del Registro Civil y este cuerpo se queda con su autoridad para gestionar el mismo a semejanza del Registro de la Propiedad o del Registro Mercantil.

 Los registradores que han visto como su más importante fuente de ingresos se ha visto devaluada por la ausencia de compra de viviendas, han  buscado otras fuentes de negocio, y para ello no han dudado en  esquilmar un servicio público como el registro civil. 
                
Esta reforma esta confeccionada por el Director General de Registro y Notariados Joaquín Rodríguez, y el Subdirector General de los Registros y del Notariado, Javier Vallejo  ambos  registradores lo que suscita dudas jurídicas ya que existe un claro conflicto de interés y  sobre todo una actuación  moral que es mas que evidente. Pero además hay que destacar que el presidente del gobierno y su hermano también son registradores y han ejercido presiones para que sus importantes emolumentos no decaigan en tiempos de recortes y restricciones. 

Este nuevo atropello en el mundo de la justicia,  desmonta un servicio publico para otorgárselo regalado a un colectivo que solo busca su intereses particular a través de la creación de tasas actualmente inexistentes para conseguir traspasar lo de todos a una elite, la muestra clara de la ideología del gobierno del partido popular.

No hay comentarios:

Publicar un comentario